El espacio de trabajo de todo mago debe estar libre de posibles fuerzas nocivas, porque podrían provocar un desequilibrio en los resultados de los rituales. Para ello, le mostramos dos métodos de limpieza con elementos sencillos de conseguir.
PURIFICACIÓN DEL ALTAR
Este rito utiliza los poderes de los cuatro elementos: Tierra, Aire, Fuego y Agua. Realice todo el procedimiento en su altar para limpiarlo de las malas energías que puedan estar acumuladas allí y de los restos de negatividades de algunos rituales practicados con anterioridad.
Coloque en su altar los siguientes elementos:
- 1 taza o plato llano con sal.
- 1 sahumerio
- Incienso de benjuí o maderas de oriente.
- 1 vela blanca.
- 1 taza de agua pura y limpia.
Procedimiento:
- Encienda el sahumerio y la vela. Póngase de pie delante del altar. Convoque las energías positivas de limpieza mágica y diga lo siguiente (aunque usted puede improvisar):
“Yo os mando, instrumentos elementales de la naturaleza, barred mi altar de todo mal. Ésta es mi voluntad: lo negativo se pulverizará.”
- Luego, tome el plato con la sal y, moviéndose en el sentido de las agujas del reloj, eche una pizca de sal en cada esquina del altar, diciendo las siguientes palabras: “Por los poderes de la Tierra, yo limpio este lugar”. Acompañe el acto con la visualización de que la sal está quemando toda la negatividad.
- A continuación, mientras humea el sahumerio, páselo por las cuatro esquinas del altar. También, en este caso, visualice el incienso limpiando la negatividad y el mal, mientras dice: “¡Por los poderes del Aire, yo limpio este altar!”.
- Ahora, es el turno de la vela. Realice el mismo procedimiento y diga, mientras mira la llama que brilla con luz purificadora: “Por los poderes del Fuego, yo limpio este altar”.
- Para terminar, ponga la vela en la mesa y tome la taza con agua. Salpique con agua las 4 esquinas de su espacio ritual. Luego, lance algunas gotas a los otros elementos que allí se encuentren. Visualice que el agua está arrastrando al mal con una ola de poder mágico y pronuncie: “Por los poderes del Agua, yo limpio este altar”.
Una vez terminado el ritual de los 4 elementos, cierre las puertas y ventanas de la habitación donde se encuentra el altar y no retire los elementos hasta que la vela blanca se haya consumido completamente y el sahumerio haya quedado reducido a cenizas.
HECHIZO DE LAS 12
Este hechizo debe realizarse una vez al mes, como mínimo.
Encienda una vela blanca a las 12 del mediodía y deje que arda durante 30 minutos.
Después, coloque un poco de esencia de rosas en una botella de agua mineral.
Una vez hecha la mezcla, salpique algunas gotas en cada uno de los rincones del espacio mágico donde suele practicar sus hechizos, sin dejar ningún lugar sin rociar.
Luego, derrame el agua que queda en la botella en la puerta de entrada a su casa para que esas energías que ha alejado no vuelvan a entrar a su espacio mágico.